me vino suave la noche
y la piel se erizaba como el trigo
me vino suave la noche
y aullando entre cortinas
El frío, ya dentro, me lo había bebido de un solo trago
y la habitación, tan quieta, dibujaba las exhalaciones,
perduraban
vino suave la noche
para desteñir mi mente
anegarla
diluirla
licuarla
y andar en sombras
Vino suave, como el latido, suave,
de la tranquilidad del no esperarte ya más
nunca
la tranquilidad quieta de que solo vendrá la noche
suave
y la piel se erizaba como el trigo
me vino suave la noche
y aullando entre cortinas
El frío, ya dentro, me lo había bebido de un solo trago
y la habitación, tan quieta, dibujaba las exhalaciones,
perduraban
vino suave la noche
para desteñir mi mente
anegarla
diluirla
licuarla
y andar en sombras
Vino suave, como el latido, suave,
de la tranquilidad del no esperarte ya más
nunca
la tranquilidad quieta de que solo vendrá la noche
suave