quiero asir mis pies
volante voladora
volátil
sútileza de piedra y madera.
acantilado dudando
entre almohadas y espigas
a duras penas me anclo a mi ombligo.
quieta
hueco, en el recoveco convexo.
por tantas veces que me comeré las palabras
a puños cerrados
por hablar sin saber a quien
sin pensar
sin oir más que mi aliento.
vuelve, el torbellino del kaos
del aquí, del ahora.
vuelve a ser trémulo el deseo de decir
el temblor caleidoscópico
re-vuelve, volviendo y volviéndome.
no me ves, no me verás.
porque no alcanzo a estar.
pero siento....